CIUDADES DE INTERÉS

Belgrado es la ciudad más grande de Serbia, recibiendo la categoría de capital, y también conocida como Ciudad Blanca. Es una de las ciudades más antiguas de toda Europa., ha sufrido innumerables guerras y conflictos, nos encontramos ante un lugar en crecimiento con una gran mezcla de culturas.

Entre las visitas imprescindibles de esta ciudad se encuentran la Fortaleza de Belgrado desde la que se puede disfrutar de unas espectaculares vistas de la confluencia del río Sava y el Danubio, la catedral de la ciudad que es un templo ortodoxo serbio de gran belleza barroca y neoclásica que destaca por los espectaculares tesoros que se guardan en su interior, incluyendo las reliquias del rey Uros III de Serbia, canonizado por la Iglesia Ortodoxa de Serbia, y el barrio bohemio de Skadarlija. Se trata de un pintoresco vecindario repleto de encantadoras casitas tradicionales. En sus callejuelas empedradas podrá encontrar bares y tabernas que han creado la leyenda de Belgrado como una ciudad repleta de ocio nocturno.

El clima de esta ciudad es de tipo continental moderado. Se caracteriza por temperaturas suaves durante todo el verano y de inviernos bastante fríos con nevadas y temperaturas por debajo de los cero grados. Los meses más lluviosos coinciden con los meses de mayo y junio.

Bratislava es una pequeña ciudad que será parada obligatoria para los viajeros que realicen un crucero por el Danubio. Tiene un casco histórico perfectamente reconstruido con una arquitectura barroca de los Habsburgo que choca con el legado comunista. Se encuentra a 60 km de Viena, y muy próxima otros países como Hungría y República Checa. Gracias  a su complejo pasado y a su enclave geográfico, la ciudad de Bratislava tiene una fascinante mezcla de arquitectura, vino y gastronomía. 

Esta ciudad se encuentra dividida por el Danubio, y como sucede en Budapest y Viena, está conectada por puentes. En el norte del río se encuentra la mayoría de los puntos más turísticos. Entre los lugares más conocidos están la Puerta de San Miguel, donde encontramos el kilómetro cero de Eslovaquia. Otro de los puntos más conocidos es el Castillo de Bratislava, se encuentra a 85 metros por encima del Danubio y es quizás el monumento más emblemático de este destino, desde donde además se pueden conseguir unas vistas impresionantes de Bratislava y del Danubio.

Budapest, capital de Hungría, es una ciudad que tiene gran encanto gracias a sus balnearios y fuentes termales. La llegada a este destino Europeo se realiza en muchos casos desde los cruceros por el Danubio desde Viena o Linz, por ejemplo. El Danubio divide la ciudad en las dos, Buda y Pest. Antiguamente fueron dos ciudades totalmente diferentes, y aún se puede respirar esta esencia. Buda, es la antigua sede real y zona residencial más elegante, por el contrario, Pest, es el corazón económico y comercial de la ciudad. Ambos lados están unidos por enormes puentes que puedes recorrer a pie, como el Puente de las cadenas, que te llevará  al barrio del Castillo y el bastión de los pescadores, además de la oportunidad de disfrutar de la  maravillosa vista de la ciudad.

Recomendamos que se visten los famosos Baños Szechenyi, se recorra la avenida Andrassy, y sobre todo se descubra el Parlamento de Budapest, que probablemente sea el icono de la ciudad, siendo el tercer parlamento más grande del mundo después del de Rumanía y el de Argentina.

Dürnstein pertenece a la Baja Austria de origen medieval, se sitúa en la orilla occidental del Danubio a 73 kilómetros de Viena. Es uno de los destinos turísticos más populares de la región del Wachau, considerado como una de sus perlas. A lo largo del río, si se recorre este valle del Danubio en crucero, se puede apreciar la arquitectura vienesa tradicional, sus calles empinadas y serpenteantes.

Este destino destaca por ser el centro de la región vinícola de Austria. En Durnstein puedes descubrir las ruinas del castillo del siglo XII donde el rey  de Inglaterra Ricardo Corazón de León fue encerrado como prisionero durante la Tercera Cruzada.

Engelhartszell se encuentra en el Valle superior del Danubio. Navegar por esta zona es como trasladarse a una postal de cuento, rodeado de exuberantes bosques y abundantes tierras de cultivo. En esta ciudad de Austria destaca el monasterio Stift Engelszell, el único monasterio trapense en Austria fundado en 1293 y con una historia muy agitada debido a varias revueltas, asedios, saqueos e incendios sufridos en el pasado.

Particularmente el monasterio es bien conocido por la producción de los licores, que son producidos por los monjes de acuerdo con recetas antiguas de 15 variedades diferentes. Las degustaciones de licor son posibles en la entrada del monasterio. Además del delicioso queso trapense, que también está disponible aquí. Desde 2012, las cervezas trapenses “Gregorius” y “Benno” elaboradas en la fábrica de cerveza Trappist en Stift Engelszell también se ofrecen.

Esztergom es una pequeña ciudad situada a 45 kilómetros de Budapest y es muy recomendable visitarla. Es ciudad limítrofe con Eslovaquia y que durante una época fue la capital del reino húngaro, es famosa por albergar la mayor basílica del país con 118 metros de altura y 49 de ancho. Su construcción duró 47 años, siendo inaugurada en 1869. Actualmente es la sede del arzobispo en Hungría.

La basílica es la atracción principal de Esztergom, donde se puede a la cúpula y apreciar sus vistas a 100 metros de altura. El recinto que ocupa la basílica contiene también los restos del Palacio Real, que acoge el Museo del Castillo. También puedes perderte en el barrio de Vizivaros con estrechas calles y edificios estilo barroco que se extienden a lo largo de la orilla del río.

Linz es una ciudad situada en el noreste de Austria capital del estado de la Alta Austria, atravesada por el río Danubio. Es una ciudad con unos 200 mil habitantes, pero aún siendo pequeña ofrece múltiples recorridos y opciones culturales para disfrutar del turismo por Europa.

Se puede llegar a Linz desde Viena o Salzburgo en coche o desde las principales ciudades austríacas en tren. Entre los principales monumentos se encuentran el Antiguo Ayuntamiento, construido en XVI. Su fachada de estilo barroco coronado por una torre en forma octogonal de 25 metros de altura. La nueva catedral de Linz, cuya construcción comenzó a finales del XIX, con estilo neogótico es otro atractivo de la ciudad.

Linz alberga el Museo Lentos de arte moderno, un espacio de exposición de los más destacados de Austria. Se encuentra a orillas del Danubio entre el puente Nibelungo  y el puente Brucknerhaus. Por la noche, su exterior tiene un increíble aspecto gracias al juego de luces que lo ilumina y se refleja en el río.

Melk se encuentra en la Baja Austria en el valle del Wachau.  En esta ciudad puede descubrir un espectacular monasterio que desde hace siglos cautiva a los visitantes de esta ciudad. La Abadía de Melk, es el gran atractivo de este destino que se sitúa sobre una colina a orillas del Danubio y que ha protagonizado alguna que otra película. Este monasterio es visible desde el crucero fluvial desde donde se puede apreciar la arquitectura del edificio de estilo barroco.

La abadía es del siglo XI cuando se convirtió en el lugar religioso más importante del centro de Europa, sin embargo su fachada parece del siglo XVIII. En su interior destaca la iglesia, la biblioteca que por la colección que alberga fue una de las más importantes de la Edad Media.

Passau, es uno de los lugares más espectaculares del Danubio por su paisaje. Es el lugar ideal para embarcarse en un crucero por el Danubio. Se encuentra en la frontera con Austria, y es conocida como la ciudad de los tres ríos, ya que allí confluyen el Danubio, el Inn y el Ilz. Esta ciudad del Danubio fue originada en la prehistoria, siendo el antiguo centro de comercio de sal.

El casco antiguo de Passau, Alemania, fue creado por maestros del barroco italiano en el siglo XVII, está formado por torres altísimas, lugares pintorescos, paseos y plazas románticas y callejuelas laberínticas. Recomendamos pasear por Höllgasse, una de las calles más importantes de la ciudad, donde hay galerías de arte a cada paso. La Catedral de San Esteban es el monumento más conocido de esta ciudad alemana, situada en el punto más alto del centro histórico de la ciudad.

Tulcea, situada a orillas del río Danubio, es una ciudad con estatus de municipio en Dobruja, Rumania. El Delta del Danubio riega la mayor parte de Tulcea, formando la Reserva de la Biosfera de mayor tamaño en la Unión Europea (además de Patrimonio Unesco en 1991).

El Delta del Danubio ha tenido presencia humana desde el neolítico, cuando aún el Delta era  un golfo del Mar Negro. Alberga 1200 variedades de plantas, 300 especies de aves y 45 especies de peces de agua dulce en numerosos lagos y pantanos.

Viena, ciudad austríaca localizada en Europa Central a orillas de Danubio, será el punto de partida perfecto para hacer un crucero fluvial y recorrer los monumentos más conocidos de Europa. Viena es un destino con con gran heterogeneidad, es antigua y moderna al mismo tiempo. Destaca su gastronomía que representa la mezcla de culturas, sus dulces y el café son seña de identidad. Además, es mundialmente conocida por su música, cuna de grandes músicos como Strauss, Beethoven o Mozart y morada de su famosísima Ópera.  Si tienes ganas de más, dispones de más de 100 museos para visitar.